Slalom de O Pino

La Escudería Talleres Galicia Sport organizó en el año 2005 la segunda edición del Slalom de O Pino. El 14 de agosto, mientras media España disfrutaba de sus vacaciones en la playa, un grupo de locos por la velocidad no dudamos a pesar del calor en disputar esta carrera. Slalom con un acertado programa de verificaciones y entrenos por la mañana y mangas oficiales por la tarde. Gran detalle el que se preparara una comida para participantes y acompañantes estando los pilotos invitados. Otro buen detalle fue el tener a un genial Miguel Álvarez como speaker durante la prueba lo que sin duda animó en gran medida el desarrollo de la misma.

Foto del Slalom de O Pino

Foto de Patxi

El trazado, de 807 metros de longitud, para mi manera de ver un slalom era perfecto. Prueba de habilidad pero sin ser tan radical como el de Caldas ni tan ‘circuitero’ como el del Salnés. Rectas con zig-zags en bajadas y subidas, conos azules donde tirar del freno de mano y un cono final donde cada piloto tenía su teoría de cómo dar la vuelta al crucero. Dentro del coche el trazado resultaría muy divertido. En las rectas con zig-zags había que guardar el ritmo adecuado porque si corrías de más en un cono te comías el siguiente. En los dos ‘pirulos’ de tirar del freno de mano había gravilla con lo cual se facilitaba mucho la operación. Y en la vuelta al crucero había espacio suficiente para girar con el volante ayudándonos un poco del freno de mano.

Foto del Slalom de O Pino

Foto de Miguel Maneiro (Wilfas)

Las sensaciones que tuve dentro del coche fueron buenas y de gran mejoría respecto al slalom de Caldas. Lástima de un error de la organización en el recuento de las penalizaciones en la primera manga y de quedarme clavado en un trompo en la segunda. Al final 16 puntos más para el campeonato y un bonito recuerdo ya que la organización entregó un trofeo a todos los participantes.

Foto del Slalom de O Pino

Premio para todos los participantes

Tuve ocasión de conocer en persona a 2 curuxos más: Antonio Villar y Popi_racing.La verdad que cada carrera de slalom se está convirtiendo en un día entre amigos. Un detalle curioso de la jornada fue que Jaime Castro se acercó a saludarme y contarme que mi querido 205 había sido suyo hace años y que cuando lo vendió le dio tanta pena que se terminó comprando otro.

Foto del Slalom de O Pino

Junto a Patxi